viernes, 14 de junio de 2013

Adiós ¿señor? profesor.

Fin de curso, y hora de despedidas.En todos los colegios se va algún profesor que deja un vacío difícil de llenar, POR SUERTE!!! Aun así, se va a otro colegio, a llenarlo de lo que, seguramente, no necesitaban.
Suelen llenarlos de la mala educación, la falta de respeto, la falta de profesionalidad, la falta de ética, de moralidad, estos profesores representan las dos caras de una misma moneda, una moneda vieja, rancia y FALSA.

Se van y con ellos se va a otro sitio la realidad de la educación, estos profesores están por todas partes, en los colegios, labrando nuestro futuro, el mío, el tuyo, el de ellos mismos. Se encargan de nuestros hijos, solo necesitan ir a la universidad y aprobar una oposición. No se les pide, educación, si no títulos, no se les pide empatía, ni capacidad intelectual más allá de la necesaria para acabar la carrera y aprobar la oposición que os decía, , tampoco capacidad emocional, no hace falta que sean sensibles, comprensivos, piadosos... Nadie mira si son buenos ni malos, pero se les permite clasificar a nuestros hijos como tal, buenos, malos, estudiosos, vagos, inquietos, tranquilos... lo que ellos crean, o quieran.

Los ¿señores? profesores de los que hablo se van, creyendo que el colegio era suyo, y llegan a otro para hacerlo también de su propiedad. NOOOO, ¿señores?, no son suyos, son míos, de mis hijas, de sus compañeros, de las mamás y papás que aportamos ahí lo más importante, los niños, la vida, la chispa, nuestras vidas, porque ellos son nuestras vidas, y ustedes va a ganarse un sueldo, podría ir a hacer escuela, pero ustedes van sólo a ejercer, en el sentido más simple de la palabra.

Adiós ¿señores? profesores, me llena de satisfacción saber que ya no estarán entre nosotros, me llena de pena saber que pasarán por sus aulas otros niños tan maravillosos, importantes y especiales, y estarán a su cargo.
Me llena de pena que existan tantos como ustedes, que hacen de nuestras escuelas lugares mediocres, inadecuados para los niños, que crean la escuela que conocemos, la de la uniformidad, la de mediocridad, la de la desigualdad. Escuelas donde se pisotean los derechos de los niños, donde se les falta al respeto, bien sea de forma directa, mediante el insulto o la humillación, bien sea de forma indirecta, con la desatención, o eso que ustedes suelen hacer muy bien, faltándole el respeto a sus familias, en muchos casos, ¿señores? profesores, ya es tal su desfachatez, su falta de educación, de profesionalidad y de saber estar, que lo hace delante de ellos, de sus madres, de sus padres y abuelos, nos faltan el respeto llenos de orgullo, de un orgullo que proviene de la misma ignorancia, de la ignorancia emocional que ustedes rezuman.
Escuelas dónde se pisotean los derechos de los niños con castigos, con deberes, trabajo intelectual excesivo, aunque ustedes prefieran llamarlo deberes o educación, eso es solo trabajo, y si se hace fuera de horario, es excesivo (eso o que tenemos un problema de rendimiento, y no es escolar, es LABORAL!!!)

Detrás de ustedes queda una escuela herida, una escuela empobrecida, su labor nos deja la que yo llamo "La Escuela Triste", una escuela que agoniza, un reflejo de la realidad que ustedes, crean a diario en sus puestos de trabajo. Una escuela mediocre, mediocre porque está formada por una mayoría de mediocres, como ustedes. Una escuela para pasar por ella sin vivirla, sin sentirla, y para recordarla con tristeza.

Esa escuela llena de los que un día, tal vez, nos operen en un quirófano, nos cuiden en un hospital, nos rescaten de un accidente, de los que, tal vez un día, sostengan su mano o la mía en nuestros momentos finales. Por esto, deseo que no cale en ellos el ejemplo y el aprendizaje de la escuela.
Porque un día, ¿señores? profesores, tal vez ese niño que esperó mojado a su mamá porque  a nadie el correspondía cambiarlo, nos limpie a usted, a mi o alguien que queremos en una residencia. Porque ese niño castigado en el pasillo... triste, lloroso y avergonzado, sostenga nuestra mano en la cama de un hospital. Porque un día, ese niño llorando su pupa hecha en el hormigón del patio, tal vez, cure nuestras pupas.
Y ese día, no desearemos que ese niño lea su contrato para ver si es su labor limpiarnos, sostener nuestra mano, o soplarnos la pupa, ese día desearemos que sea un ser humano íntegro, empático y capaz de ver nuestras necesidades.


Los maestros y profesores hacen futuro, pero ¿qué futuro? En sus manos está hacer un futuro digno o indigno.
Yo se que los profesores y maestros son el profesional más importante de la sociedad, lo se porque veo que esa enfermera, el médico, el bombero o el policía que nos atiende, que el ingeniero, el arquitecto, el astronauta... TODOS, tiene algo en común, y es que antes hubo un profesor (muchos profesores), y TODOS, dejaron huella en esa persona, y TODOS somos lo que somos, sobretodo gracias a nuestras familias, pero llevamos huellas imborrables de los profesores, huellas, que en muchos casos son terribles, un lastre, una herida mal cicatrizada.

Adiós ¿señores? profesores, a mi si me están enseñado algo, y es que hay que luchar con tanta fuerza como lo hago, para que los ¿profesionales? como ustedes, no se carguen el futuro de todos. Me ha enseñado que tiene razón Claudio Naranjo, cuando dice que en España las luchas en educación no funcionan porque nunca se pidió una educación mejor, si no mejores condiciones laborales. Me ha enseñado, que no debo ir con la marea de profesores, si no seguir mi propia marea, hacia una enseñanza de calidad, no una enseñanza de cantidad. Me ha enseñado, que los docentes pueden ser peor de lo que había imaginado, y que son incluso un peligro para la educación de los niños. Me ha enseñado, que debo seguir ayudando a mis hijas a desaprender algunas de las cosas que aprenden la escuela.

Y a todos ustedes, Maestros y Profesores, les digo una cosa. No degraden su profesión, la más importante para la sociedad, la que puede cambiar el mundo, la que hace futuro para todos. No la degraden, hagan de ella una profesión digna, que es lo que debe ser. Trabajen en positivo, pensando en los niños, pensando como niños, educando con el ejemplo, aprendiendo cada día de ellos. Y si así lo hacen ustedes, un día serán esos grandes héroes del día a día.

Y no permitan ustedes que otros la degraden, porque cuando esa compañero en el aula de al lado llama tonto a un niño, lo castiga injustamente, lo amenaza o toma represalias hacia él, y usted se calla, está también degradando su profesión, y siendo cómplice de labrar un futuro que no nos conviene. Y lo peor, están haciendo un presente difícil para los niños, y poniendo trabas a su infancia.






********************************************

Hemos hecho algunas camisetas, esta es una vieja camiseta pintada con rotuladores. Para mi tiene un gran significado, no solo por la frase, sino porque al ser vieja y escrita con rotuladores sin más, me recuerda que lo importante no son los medios, el material, o la habilidad que tengamos. Lo importante son las ganas de hacer, de transmitir...


Gracias por leerme, si habéis llegado hasta aquí, es que el mensaje ha calado en vosotros, que habéis disfrutado de lo que escribo y estéis o no de acuerdo, os interesa por algún motivo. Es un texto sin revisar mucho, porque escribía con el corazón, desde mis sentimientos más puros, así que espero que la redacción resulte entendible. Besos a todos, hoy más que nunca.


Algunos ya sabréis que he tenido un problemilla con esta entrada, cosas de singular, plural, etc... ;-)

Seguro que muchos estáis a la espera de que el curso que viene vuestros hijos tengan más suerte, os recomiendo este blog, no tiene  desperdicio, en esta entrada habla sobre lo que os digo. Y también os recomiendo escribir sobre esto, sobre lo que pasa en las escuelas, porque seguro que tenéis mucho que contar, y hay que crear conciencia sobre el tema. En las escuelas se pisotean los derechos de los niños y sus familias, se les trata sin respeto... ¡¡¡No debemos permitirlo!!!

15 comentarios:

  1. Eva CHAPO!!!!
    Nada que anadir!!
    Besitos

    ResponderEliminar
  2. qué pena que tan malos profesionales puedan hacer tanto daño impunemente, y qué pena que nadie se sienta capaz de detenerlos... o si se sienten capaces que no se atrevan... o si se atreven que crean que no es asunto suyo...
    Nos queda la esperanza de ser conscientes del problema para poder seguir nuestra lucha agotadora, como David contra Goliat ¡no te rindas nunca!

    ResponderEliminar
  3. <Gracias por compartir tu corazón, y sacar lo que te pueda dañar, sera compartido por mucha gente, todos tenemos en el recuerdo profesores así, pero los buenos recuerdos y gente que vale borra los malos ratos. Besos.

    ResponderEliminar
  4. Pues caro que te entiendo!!!y te has expresado perfectamente..Es lamentable, pero como ese señor hay muchos.

    ResponderEliminar
  5. Me alegro mucho que os podáis quitar de encima al ¿señor? director, tanto los padres y madres como los alumnos. Pero como bien dices, si va a otro centro, no se gana nada, sino que el problema se traslada simplemente.
    Lamentablemente hay muchos docentes que no deberían ejercer, pues el tratar como un simple trabajo es un error muy grave. Conozco varios casos de gente que no aprobaban su primer año de carrera (la elegida) y se pasaban a magisterio, como si fuese la carrera más sencilla posible... ¿vocación?... ¿para qué?... en fín.
    Pero con ésto no quiero tampoco generalizar, pues también hay profesores que disfrutan con su trabajo y eso se nota. Son docentes vocacionales, que siempre intentan aprender cosas nuevas, otros métodos para complementar los que consideran que no son suficientes, que saben transmitir, que saben valorar a cada niño individualmente... lo que debería ser siempre en una profesión tan importante para el futuro.
    Todos recordamos los profesores buenos y malos que hemos tenido, algunos los olvidamos por mediocres, que creo que son los más peligrosos de todos, esos que pasan desapercibidos, como fantasmas, personas grises que no transmiten nada. Porque si un profesor es bueno te entusiasmará, si es malo te rebelarás en contra, pero si es mediocre te puede contagiar esa actitud y eso no podemos permitirlo.
    Muchas gracias Eva por luchar por lo que crees. Si todos los padres y madres fuesen como tú, muy diferente sería el sistema educativo en este país, pero la gran mayoría de padres utiliza la escuela como simple guardería. Si los propios padres no se involucran en la educación formativa de sus hijos que no se quejen después.
    Sigue así, aunque te lluevan críticas, que seguro que las hay.

    ResponderEliminar
  6. Tu escribiste con el corazon, ese debe ser el motivo por lo que el mensaje llega al corazon, sobre todo de los padres que directa o indirectamente hemos sufrido lo que dices. Esperemos que el ¿señor? Director y los ¿señores? Profesores no solo lean esto como ¿profesionales? Si no como padres con hijos.

    ResponderEliminar
  7. Eva, ójala la mayoría de padres lucharan por la educación de sus hij@s como tú lo haces.
    Tanto mi marido como yo somos profesores y si alguien escribiera esas palabras sobre mí te puedo asegurar que se me caería el alma a los pies porque significaría que he fracasado estrepitosamente en el ejercicio de mi profesión y, aún peor, que he dejado una huella fatídica en mis alumn@s.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  8. Cuando sera el dia que los niños no tengan que decir, tendré mas suerte el próximo año?
    Ánimo Eva que ahora tienes unos meses para recargar las pilas.

    ResponderEliminar
  9. Totalmente de acuerdo con tu escrito, todas y cada una de esas palabras define al ¿señor? director...k de eso tiene muy poco.Un personaje irrespetuoso hacia las familias k no merece ni el buenos días, le deseo todo el desprecio y falta de atención que tuvo con todos los que formamos la escuela....sin mas, me llena gritar de alegría¡¡ ADIOS ¿señor? director¡¡¡ :)

    ResponderEliminar
  10. Se nota que hablas desde el corazón. Eres muy valiente al ser capaz de publicar lo que sientes. Un buen maestro es mucho más que una persona que ha aprobado una oposición.

    ResponderEliminar
  11. Me alegro que el texto haya regresado. Si alguien se siente aludido, por algo será.
    Singulares, plurales, qué más dá, todos sabemos de qué va ;-)
    Yo aún recuerdo un profesor en mi época de alumna, de EGB (sí, soy de las de EGB aún), uno en particular, que se dedicaba a ridiculizar a un compañero... lamentable... por suerte el algunos de nosotros le plantábamos cara.

    ResponderEliminar
  12. Parecía que estaba leyendo algo sobre la profesora de mi hijo mayor, qué horror, de señora de verdad que sí.

    Por suerte este año ya es el último que tiene con ella. él no es buen estudiante pero tampoco es que la profesora ayude en que el niño tenga más ilusión por estudiar.

    ResponderEliminar
  13. Gracias por compartir tus sentimientos con nosotr@s, porque a veces muchos nos sentimos así, y no sabemos cómo expresarlo, o simplemente, nos hace sentir que no estamos solos. Eres muy valiente Eva, y lo que dices es verdad. Un abrazo fuerte y ojalá muchos leyeran tus palabras. Un beso

    ResponderEliminar
  14. Muchísimas gracias por vuestros comentarios!!!

    Se que por desgracia muchos sufrimos estos profesores, y espero que cada vez seamos menos, que tantos movimientos en favor de una educación respetuosa y más personalizada, acaben por llevaros al cambio.

    Y si, ojalá mucha gente me lea, bueno, mucha gente me está leyendo, ya supera las 200 lecturas, y las que vendrán. Gracias a todos!!!

    ResponderEliminar
  15. Eres genial y muy valiente. Sigue así, campeona!

    ResponderEliminar